Descargar el archivo;: La acción desinteresada
“Siempre he dicho que un acto desinteresado es tan poderoso que ninguna fuerza en el universo lo puede detener. Sólo si tiene algún rastro de egoísmo puede ser detenido. Si en alguna parte entra en el pensamiento algún pequeño deseo de renombre, reconocimiento o aprecio, el acto desinteresado se hace inadecuado para lograr el éxito”.
En uno de los satsang efectuados en la Divina Presencia en Australia, el 23 de septiembre de 2015, un devoto preguntó por qué aún las cosas pequeñas se hacen difíciles de lograr.
PREGUNTA: Gracias, Swami, por salvarme de una enfermedad grave, el año pasado. Soy de Fiyi, y entiendo que pronto irás también a Fiyi. ¿Por qué es tan difícil para nosotros los fiyianos hacer algo allí? Hay muchas oportunidades de servicio, y la gente es muy amorosa y amable, pero sin embargo, tan sólo para conseguir un equipo de sonido tenemos que hacer una gran colecta de dinero. Esto no está permitido por la Organización Sai, y es muy difícil hacer cualquier cosa en los Centros Sai. ¿Por qué tanta gente está emigrando, Swami?
SWAMI: ¿Quién puede detener a alguien que está haciendo algo desinteresadamente? Nadie tiene que tener expectativas. Deben analizar con mucho cuidado en qué se han equivocado, y por qué el trabajo no está progresando. Siempre he dicho que un acto desinteresado es tan poderoso que ninguna fuerza en el universo lo puede detener. Sólo si tiene algún rastro de egoísmo puede ser detenido. Si en alguna parte entra en el pensamiento algún pequeño deseo de renombre, reconocimiento o aprecio, el acto desinteresado se hace inadecuado para lograr el éxito. Por eso, analicen con cuidado y hallarán la razón de por qué es así. En alguna parte ha habido egoísmo. No ha sido completamente desinteresado, y es por eso que no ha ocurrido.
Esta es la razón principal, no sólo en Fiyi, sino en cualquier parte. Pregúntenle al Sr. Gary, que está aquí: ¿es fácil hacer cosas desinteresadas? Es difíci. Den el primer paso y luego manténgase firmes, y las cosas ocurrirán. Cuando Sreenivas fue a Raipur, era un terreno baldío, y Yo le dije que en un año tenía que haber allí un hospital. Él no era de Raipur, no sabía el idioma, nunca había estado ahí. Pero dijo que, a cualquier costo, permanecería allí día tras día, sin regresar a Bangalore hasta haber concluido. Alguien que había vivido siempre en Bangalore fue hasta Raipur, sin ningún apoyo, sin ayuda de nadie, y comenzó a trabajar solo. Al ver su entusiasmo, se fueron sumando más y más personas.
Miren, para arrastrar un tren se necesita una locomotora. Si ustedes pueden convertirse en la locomotora, seguramente el tren se moverá, pero todos quieren ser vagones, nadie quiere ser la locomotora. La locomotora necesita trabajar más duro que los demás. Si una persona asume la tarea, con toda certeza podrá lograr el éxito. Si todos esperan que los demás lo hagan, el tren no irá a ninguna parte. Aquél que tiene que liderar, tiene que sacrificarse; esta es la única manera. El mundo lo seguirá.
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