MI JORNADA INTERIOR
Haz lo que Él dice
Dra. Krupali Tappoo
La Dra. Krupali Tappoo es un médico australiano
calificado y entrenado en medicina general
que dirige la misión médica de Swami en
Fiji junto con su marido, el Sr. Sumeet Tappoo y su familia. Actualmente, según la guía divina,
está sirviendo como Directora de Sri Sathya Sai Sanjeevani Medical Centre, Sri Sathya Sai
Sanjeevani Children’s Heart Screening Centre y el próximo Hospital Cardíaco Infantil Sri Sathya Sai Sanjeevani en Fiji. La Dra. Krupali es propietaria de
una consulta médica privada en la capital, Suva, y también es profesora adjunta de medicina familiar en la Universidad Nacional de Fiji.
En 2018 fue galardonada con el honor de ser la “Persona del Año de Fiji”.
Dejó Australia en 2016 y regresó a Fiji por orden de su amado Señor. La Dra. Krupali ha sido la encargada
de organizar cirugías cardíacas pediátricas en Fiji en los últimos años, lo que le ha permitido comprender
la necesidad imperiosa de que Fiji tenga su propio hospital pediátrico de cardiología,
como ha requerido Swami. Ha estado participando en la jornada del Hospital Sanjeevani
desde sus inicios y espera con ansia el día en que dé a luz nuevos “regalos de vida” para cientos y miles de niños.
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Siempre he creído que existe Dios. Pero la forma no me importaba tanto. Mi
abuela solía decir: “Tanto si rezas a
Krishna, Rama o Sai Baba, todos son en última instancia uno
y lo mismo”.
No sabía mucho sobre Bhagavan Sri Sathya Sai Baba antes de mi matrimonio con Sumeet,
cuya familia ha sido una ardiente devota de Baba, a través de varias generaciones. Sin embargo,
mi primera experiencia con Bhagavan Baba en Prashanti Nilayam fue asombrosa. Después de nuestro
matrimonio, tuvimos una entrevista con Baba el 23 de julio de 2007 y supe que había encontrado a Dios.
Experimenté el amor puro por primera vez en mi vida. Baba también fue muy amable, ya que
materializó un “akshayapatra” para mí, una caja de plata en la que se manifestaba vibhuti.
Esta experiencia de Su amor y gracia tuvo un impacto eterno en mí.
Mi verdadero viaje de transformación espiritual
comenzó ocho años después, en septiembre de 2015
cuando Baba vino a Fiji en Su forma Sutil. Incluso
antes de Su llegada, sólo con escuchar las experiencias de Sumeet, supe dentro de mí que Baba era Dios. En marzo de 2015 en Muddenahalli, Baba
había mencionado a mi esposo y a sus
padres, que Él vendría a Fiji y que mucho
trabajo iba a suceder en todo el mundo.
Antes de Su viaje a Fiji en septiembre, Sumeet viajó con Baba a los Estados Unidos de
América. La experiencia que nos dio a ambos
durante este viaje – Sumeet en Estados Unidos y yo en Australia –
fue simplemente divina. Mientras rezaba en mi
sala de altar en mi casa en Australia antes de ir a trabajar, Baba estaba relatando mis oraciones a Sumeet
en tiempo real. Él le decía exactamente lo que yo le rezaba y lo que le pedía.
Cuando Sumeet me llamó para contarme lo que Baba dijo
me hizo llorar. Fue una
experiencia que afirmó nuestra fe en que Él está siempre con nosotros.
Cuando Baba vino en septiembre de 2015 a Fiji, yo había
venido desde Australia para conocerlo. En el segundo
día de su viaje, Él dio una entrevista personal a
mis padres y a mí.Tan pronto como se sentó, dijo: “Hemos utilizado la tierra, el agua y el aire de este
país. Es hora de devolver a este país. Todo el mundo
toma de este país, pero nadie da.Termina tu educación en Australia y múdate a Fiji.Tengo
muchos planes para ti. Construiremos un hospital”. Todo lo
que pude decir fue: “Haré todo lo que digas”. En
ese día le prometí a mi maestro que haría todo lo que Él me dijera, sin importar
que me dijera, o lo difícil que se sintiera.
Todo el viaje fue emocionante y recuerdo vívidamente la abrumadora sensación de paz en la presencia de Baba, con lágrimas de alegría cayendo
de mis ojos, al darme cuenta de que había encontrado a
mi maestro. Haciendo el traslado desde Australia,
un país desarrollado a Fiji, que todavía es un
país en desarrollo, no fue fácil, pero sabía
que esta era la siguiente fase de mi vida y una oportunidad que me había dado Dios. Me di cuenta de
que tenía que hacerlo pase lo que pase.
Como soy médico, entiendo la situación de una persona
cuando está enferma, pero ahora
mi comprensión ha madurado a otro nivel, después de haber participado
en cirugías cardíacas de niños desde 2016.
En marzo de 2016, exactamente un mes después de mi traslado
a Fiji, un cirujano cardíaco pediátrico de Raipur,
el Dr. Ashish Katewa, vino a Fiji para una visita de reconocimiento
con el objetivo de realizar la primera fase de cirugías
en agosto de 2016. Asistí a muchas reuniones
con él y conocí a muchos funcionarios del Ministerio de Sanidad y del principal hospital público, un lugar
donde había trabajado muchos años antes.
En agosto de 2016, el equipo de Sanjeevani de Raipur, junto con una enfermera de quirófano cardiaca
de Australia y un anestesista de Omán
operaron a 23 niños con cardiopatías
congénitas. La observación de las cirugías en el quirófano y ver por primera vez el corazón abierto de un niño, fue uno de los mejores momentos de mi vida. Hay al menos 200 niños que nacen cada año con una cardiopatía
congénita en Fiji y más de 2.500 en el Pacífico Sur.
No hay profesionales médicos locales
que puedan realizar cirugías cardíacas a niños y hay muy pocos equipos visitantes que vengan a operar.
Muchos niños siguen muriendo
debido a la falta de disponibilidad, inaccesibilidad y la imposibilidad de pagar, ya que las cirugías cuestan más de 100.000 dólares en el extranjero. Me duele el corazón al pensar en esto, experimentando la impotencia que sentiría si mi hijo se estuviera muriendo y yo no
no pudiera costear o proporcionar el tratamiento necesario. Agradezco a
a nuestro querido Baba por pensar tan amorosamente en estos niños y proporcionarles un nuevo
regalo de vida con la ayuda de los equipos de visita que
organizamos y ahora con el próximo Sri
Sathya Sai Sanjeevani Children’s Heart Hospital, que será un faro de esperanza para miles de
madres.
Dra. Krupali Tappoo
Fuente: Vasudhaiva Kutumbakam (Numero 10 – Diciembre 2021, Global Monthly Newsletter)